Su mayor ventaja es que acepta mascotas y que sus precios son accesibles, sin embargo, la atención del personal de recepción no es tan buena y la habitación no estaba muy limpia (había pelos en las camas y basuritas en el piso). Cabe mencionar que la atención de la señorita del buffete de desayuno si fue bastante amable.
Llegamos antes de la hora del check-in. Normalmente en los hoteles me toca que cuando la habitación ya está disponible, te dejan entrar antes, sin embargo, aquí primero nos dijeron que no había disponibles y después que serían $700 pesos por entrar antes. Me hucieron esperar 2 horas y ya me dieron la habitación antes del check-in.
Adicional, me cobraron un depósito por mi perrito de 1000 pesos que mencionaron se devolvería y al final, posterior a informar del checkout para que fueran a revisar, se estaban haciendo sordos para devolverlo, tuvimos que pedirlo explícitamente.
La verdad sólo volvería si necesitara un hotel que acepte mascotas pero si no, no.